Calvillo es uno de los Pueblos mágicos de México y durante la época de la colonia se conocía como Valle de Huajúcar que significa: Lugar de sauces. Aquí, se instalaron los primeros pobladores de origen español, criollo y mestizo.
Calvillo Pueblo Mágico
El clima de este pueblo mágico es muy agradable: semi cálido, cuenta con una reserva forestal de roble, álamo, cedro y pino, además de un bosque de encino. Respecto a la fauna que se puede encontrar en el lugar es: lobo, puma, coyote, tejón, liebre, jabalí, zorro, venado cola blanca y algunas especies de aves.
El nombre de este puedo se debe en honor a su fundador José Calvillo, que en 1778 donó las tierras para el asentamiento de este poblado y es el mejor y gran producción de guayaba que es la principal actividad comercial de este municipio.
Escudo de Calvillo
El escudo se compone de cimera, un casco o yelmo de caballero en honor al fundador del estado, el célebre capitán Juan de Montoro.
Sombrean el sable y lambrequín, hojas de acanto al natural, representando el desenvolvimiento de los once fundadores que acompañaron a Montoro. En la parte media de los cuadrantes se encuentra un libro abierto señalando el artículo 115 constitucional, en el cuadrante de la parte inferior izquierda se encuentra la Parroquia de San José y unos arcos que fueron erigidos al inicio de su fundación.
En la parte superior izquierda se encuentran unas manos sosteniendo unas guayabas, que significan el principal producto de la región. En la parte superior derecha se encuentra el Señor del Salitre, al que se le rinde culto en la región. En el cuadrante de la parte inferior se encuentra la presa de Malpaso y el cerro del Espinal. Enmarcando los cuadrantes se observan los siguientes lemas: tierra pródiga, gente laboriosa, fruto generoso y Valle de Huejúcar.
Cronología de Hechos Históricos
| En terrenos del Salitre y Salitrillo, los más importantes de la región, se fueron estableciendo algunos indios nahuas, los que habitaron este lugar, reconociéndose sus ejidos por el Virrey de Leyva Sin embargo, el español López de Nava los arrojó de ahí y ocupó sus tierras. | |
| Don José Calvillo, dueño de la hacienda de San Nicolás, hizo una donación de tierra para la fundación del pueblo de Huejúcar, lo cual fue hecho oficialmente el 18 de noviembre por el señor canónigo y doctor Manuel Colón de Larreategui con el nombre del Valle de Huejúcar. | |
| Fue elevado a categoría de Villa en 1848 con el nombre de Calvillo en honor a su benefactor. |